¿Qué es la precipitación tartárica?
En algunas ocasiones ocurre que cuando se descorcha una botella de vino aparecen unos pequeños cristales de color rojo oscuro que se encuentran adheridos al corcho, o también se pueden observar en el fondo de las copas. Esto es lo que se conoce como precipitación tartárica y que te puede llegar a suceder si decides comprar vino directo de bodega, pero que, en ningún caso, va a alterar la calidad del caldo que adquieras.
Factores que influyen en la aparición de esa precipitación
Se trata de un defecto organoléptico y aparece como un sedimento con aspecto de cristal, coloreado ligeramente y formando una costra normalmente. Pero no hay de que preocuparse, el vino se sigue manteniendo limpio y sus propiedades no se modifican con la presencia de la precipitación tartárica, aunque ciertos consumidores pueden llegar a pensar que es un defecto del vino. El ácido tartárico se encuentra en las uvas de modo natural. En el caso de los tintos, es el encargado de crear un equilibrio ácido-astrigencia-dulce y en el caso de los blancos entre el ácido-dulce.
El frío es uno de los factores principales que influye en su aparición. Someter a temperaturas por debajo de los 0º C a los vinos es un excelente tratamiento para que se eliminen los cristales antes de proceder al embotellamiento. Por otro lado, un elevado grado de alcohol también potencia estas precipitaciones, así como el calcio y el potasio. Para evitar que aparezca es conveniente someter al vino a un tratamiento por frío.